SOLOMILLO AL WHISKY, SOLOMILLO BORRACHO

PREPARACIÓN DE LA RECETA DE SOLOMILLO AL WHISKY

Cortamos el solomillo en rodajas de poco más de un centímetro aproximadamente.

Sal pimentamos los medallones de solomillo por ambos lados al gusto.

En una sartén muy caliente con unas gotas de aceite, sellaremos las rodajas unos segundos por cada lado.

Es muy importante que la sartén esté bien caliente para que el solomillo no suelte su jugo.

Queremos que se doren por fuera pero que se quede sin hacer por dentro.

Mejor, hacerlo por tandas, que no todas las rodajas a la vez, para no perder temperatura.

Cuando las tengamos todas, las reservamos.

Pasaremos a preparar la salsa.

Usaremos los dientes de ajo enteros y con piel, podemos machacarlos un poco o hacerle algún corte con el cuchillo, eso es opcional, nosotros no lo hemos hecho.

Ponemos el aceite de oliva virgen extra, en la misma sartén, que hemos usado para sellar el solomillo.

Cuando el aceite este caliente, añadimos los dientes de ajo, queremos dorarlos un poco, pero sin que lleguen a quemarse.

Mientras, en un vaso, ponemos el zumo de medio limón, una pastilla de caldo de carne y completamos con el whisky.

Disolveremos la pastilla de caldo en el líquido, para ello nos podemos ayudar calentando el vaso unos segundos en el microondas.

Cuando se haya dorado el ajo, añadimos la mezcla de whisky y dejamos cocinar unos minutos, hasta que se evapore el alcohol.

Añadimos las rodajas de solomillo a la salsa, lo vamos a cocinar solo un par de minutos,  con la tapa puesta.

Con ese tiempo, es suficiente para que se termine de hacer, si nos pasamos de cocción, el solomillo se reseca y queda más duro.

Pasado ese tiempo lo apartamos del fuego y lo servimos caliente.

Si por un casual,  no lo vamos a consumir en ese momento, un buen consejo, es apartar del fuego, antes de poner las rodajas de solomillo, ya cuando queramos usarlo,  lo terminamos de cocinar para servir caliente.

Así conseguiremos un solomillo jugoso y tierno.