Enfriar completamente: Deje que los filetes Salisbury se enfríen a temperatura ambiente antes de guardarlos. Esto evita la condensación y que se ablanden.
Use recipientes herméticos: Coloque los filetes fríos en recipientes herméticos. Si le sobra salsa, puede guardarla aparte o verterla sobre los filetes.
Refrigerar o congelar:
Refrigeración: Si planea consumirlos en pocos días, guárdelos en el refrigerador. Se conservarán en buen estado durante unos 3 o 4 días.
Congelación: Para una conservación más prolongada, puede congelarlos. Envuelva cada filete firmemente en film transparente o papel aluminio y luego colóquelos en un recipiente o bolsa aptos para congelador. Pueden durar hasta 3 meses en el congelador.
Recalentamiento: Cuando esté listo para comer, recaliente los filetes en el microondas o en la estufa. Si están congelados, es mejor descongelarlos en el refrigerador durante la noche antes de recalentarlos.
¡Disfrutar!
Rodajas de patata al horno con queso