Instrucciones paso a paso
1. Preparar la fruta
Machacar los plátanos en una olla grande. Incorporar la piña triturada (con su jugo) y el coco rallado (opcional).
2. Agregar el azúcar y el jugo de limón
Incorporar el azúcar y el jugo de limón. El jugo de limón no solo le da un sabor fresco y ácido, sino que también ayuda a conservar la crema.
3. Cocinar la mezcla
Calentar la mezcla a fuego medio hasta que hierva suavemente, revolviendo con frecuencia. Reducir el fuego y dejar cocinar a fuego lento durante 15-20 minutos, o hasta que espese y tenga una consistencia similar a la de la mermelada. Revolver con frecuencia para evitar que se pegue.
4. Potenciar el sabor
Retirar del fuego e incorporar el extracto de coco (opcional). Dejar enfriar ligeramente.
5. Conservar y servir
Envasar la crema de mono en frascos limpios y herméticos. Una vez fría, conservar en el refrigerador hasta por 4 semanas.
Cómo disfrutar la Mantequilla de Mono
Úntala en tostadas o bagels
Úsala como relleno para pasteles o cupcakes
Mézclala con avena o yogur
Sírvela sobre panqueques, waffles o tostadas francesas
Sírvela como dip con galletas Graham o fruta
Consejos y variaciones
Versión con trozos: Deja algunos trozos de plátano menos machacados para darle más textura.
Toque especiado: Añade una pizca de canela o nuez moscada para un toque cálido.
Opción baja en azúcar: Reduce el azúcar y añade un chorrito de miel para endulzar.
Conservación: La Mantequilla de Mono se conserva mejor refrigerada, pero algunos la adaptan para enlatarla; sigue siempre las instrucciones de envasado seguro si lo intentas.
Conclusión
La receta de la Mantequilla de Mono es una creación divertida y frutal que transforma ingredientes cotidianos en algo mágico. Es dulce, tropical y lo suficientemente versátil como para alegrar cualquier comida. Una vez que prepares tu primer lote, no te sorprendas si se convierte en un básico de tu nevera.