Disponibles en diversos tamaños, formas y sabores, los frijoles son versátiles y ricos en nutrientes. Ya sean frescos, secos, congelados o enlatados, los frijoles son deliciosos y se pueden incluir en las comidas en cualquier época del año. Se incorporan fácilmente a varios platos, lo que los convierte en un ingrediente ideal para el desayuno, el almuerzo o la cena.
Las guías alimentarias sugieren un consumo máximo de aproximadamente 3 tazas de frijoles por semana. Reconocidos por sus importantes beneficios para la salud, los frijoles se recomiendan como alimento básico en una dieta saludable, especialmente para quienes buscan mejorar su salud general y controlar afecciones como la diabetes. Gracias a su alto contenido nutricional y su capacidad para regular el azúcar en la sangre, los frijoles son un aliado formidable en el control dietético de la diabetes.