Preparación
1. Preparar el relleno
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla picada y sofríe hasta que esté transparente, unos 2-3 minutos. Incorpora el ajo y cocina durante 30 segundos más hasta que desprenda su aroma.
Añade los pimientos (si los usas), el pollo desmenuzado y las especias: comino, pimentón, chile en polvo, sal y pimienta. Mezcla bien para que el pollo quede bien impregnado con los condimentos.
Baja el fuego y agrega el queso crema y la crema agria. Mezcla hasta obtener una consistencia suave y cremosa. Retira del fuego y, si lo deseas, incorpora el queso rallado y el cilantro. Deja que la mezcla se enfríe un poco antes de rellenar las tortillas.
2. Armar los burritos
Precaliente el horno a 200 °C (400 °F). Cubra una bandeja o molde para hornear con papel pergamino o engráselo ligeramente.
Extiende una tortilla sobre una superficie plana. Coloca aproximadamente ⅓ de taza del relleno de pollo en el centro de la tortilla. Dobla los lados hacia adentro y enróllala firmemente desde abajo hacia arriba, dándole forma de burrito. Colócala con la abertura hacia abajo en la bandeja para hornear preparada. Repite el proceso con las tortillas y el relleno restantes.
3. Pincelar y hornear
Pincela ligeramente la parte superior de los burritos con mantequilla derretida o aceite de oliva; esto ayudará a que queden crujientes y deliciosos en el horno.
Hornea sin tapar durante 15-20 minutos, o hasta que los burritos estén dorados y ligeramente crujientes por fuera. Para que queden más crujientes, puedes gratinarlos durante 2-3 minutos al final, vigilándolos de cerca para que no se quemen.
4. ¡Sirve y disfruta!
Retíralas del horno y déjalas enfriar un poco antes de servir. El relleno estará caliente y cremoso por dentro.
Sugerencias de presentación
Sirve estos burritos con tus ingredientes y acompañamientos favoritos, como por ejemplo:
-
Salsa fresca o pico de gallo
-
Guacamole o aguacate en rodajas
-
Crema agria o mayonesa chipotle
-
Una guarnición de arroz mexicano, frijoles negros o ensalada de maíz
También son perfectos para almuerzos para llevar: simplemente envuélvalos en papel aluminio y recaliente cuando sea necesario.
Almacenamiento y recalentamiento
Deja enfriar los burritos por completo antes de guardarlos.
-
Refrigerar: Guardar en un recipiente hermético hasta por 3 días.
-
Congelación: Envuelva cada burrito individualmente en papel aluminio o film transparente y colóquelo en una bolsa para congelar. Congélelo hasta por 2 meses.
Para recalentar, hornear desde congelado a 190 °C (375 °F) durante unos 25 minutos, o calentar en el microondas durante 1–2 minutos hasta que esté bien caliente.
Conclusión
Estos burritos de pollo crujientes al horno combinan todo lo que te encanta de la cocina mexicana: un sabor intenso, un relleno cremoso y una tortilla perfectamente tostada. Son sencillos, versátiles e ideales para toda la familia, lo que los convierte en una receta perfecta para las noches de semana o para preparar con antelación. Cada bocado ofrece una mezcla de especias, textura y una sensación reconfortante; este plato demuestra que no necesitas freír para disfrutar de ese crujiente irresistible. Una vez que pruebes estos burritos dorados y con queso, se convertirán rápidamente en uno de los platos favoritos de la familia.